EURONEWS.- La tasa de paro en el Algarve, en el sur de Portugal, aumentó casi un 232% en junio, en comparación con el mismo período del año pasado. La economía de la región, que depende del turismo especialmente durante el verano, sufre una grave depresión por falta de visitantes.
La imposición de cuarentena contra el coronavirus en el Reino Unido ha sido el último golpe para el Algarve, que solía recibir alrededor de dos millones de turistas británicos.
El número de personas que piden ayuda a Refood Faro, movimiento de voluntarios que recolecta y distribuye alimentos, ha aumentado dramáticamente desde marzo.
Carlos Reis y Paula Matias, coordinadores de Refood Faro explican: "Antes de la pandemia atendíamos a un total de 114 personas y, en este momento, tenemos unas 300, de las cuales cien son niños, y ha ido creciendo día a día".
Pero no son solo números. Cada acción responde a una necesidad, atiende a una persona que está probablemente en el peor momento de su vida.
Esta es la temporada de más baja actividad del Algarve en décadas. Pero con los trabajos de temporada que terminan en octubre, es probable que el mercado laboral se deteriore aún más.