Ir al contenido principal

La mitad de los propietarios no lleva a su gato al veterinario

Cristina Yuste. EFEverde

Gato-foto-de-CristinaBenito-para-EFEverd

La mitad de los propietarios no lleva a su gato al veterinario y más del 60 por ciento asegura que incrementaría la frecuencia de las visitas al especialista si le resultara más sencillo manejar el estrés del animal.
Así se desprende de un estudio a nivel mundial sobre la relación de los propietarios de gatos con sus veterinarios a partir de más de 4.000 encuestas, hecho público con motivo de la celebración, este 8 de agosto, del Día Internacional del Gato, impulsado desde el año 2002 por el Fondo Internacional para el Bienestar Animal (IFAW, por sus siglas en inglés).

No obstante, existen otras dos fechas para homenajear a estos felinos, el 20 de febrero y el 29 de octubre, ambas a propuesta de entidades y colectivos de Estados Unidos.

Las principales razones que argumentan los propietarios de gatos para no acudir a la consulta de los especialistas son que el problema se acabará resolviendo solo (38 % de los encuestados), que el veterinario causa estrés al animal (22 %), el elevado coste económico (17 %) o la presión de seguir los tratamientos (14 %).

Animales muy reservados

Los veterinarios aseguran que los gatos son “maestros del camuflaje” y no suelen mostrar signos clínicos de una enfermedad hasta que está muy desarrollada, por lo que defienden el asesoramiento profesional para la prevención y tratamiento de posibles patologías.

Javier Manzanares, veterinario y experto en alimentación de mascotas, subraya que “es importante realizar chequeos a los gatos y no acudir al veterinario solo cuando ya se está siguiendo un tratamiento” y asegurar así la prevención, la detección temprana y la reducción del impacto de la posible enfermedad.
En un comunicado, Manzanares hace un llamamiento a los propietarios para realizar visitas periódicas al especialista “al menos una vez al año”, pues los gatos “son reservados por naturaleza y tienden a ocultar cualquier tipo de debilidad, fomentando así su autodefensa ante cualquier depredador o amenaza”.

Más de la mitad de los dueños aseguran además que acuden a consulta una vez su gato ha presentado un síntoma concreto, “aunque en ese momento la patología podría estar ya bastante desarrollada”, sugiere el experto.

Atención veterinaria

Por ello, los expertos aconsejan comenzar las visitas periódicas desde que el animal es un cachorro para asegurar su correcto desarrollo, cubrir las necesidades en los primeros meses de vida y ayudarles a normalizar esta relación con el veterinario.



En este sentido, recuerdan que el gato se debe acostumbrar desde pequeño al transportín, que éste debe ser sólido, seguro y estable y que el animal lo debe reconocer previamente en su hogar para evitar el rechazo.

Javier Manzanares, experto en nutrición animal en la compañía Royal Canin, enfatiza en que “lo que más ayudará a nuestro gato es ir acostumbrándole desde cachorro”.

Así, las revisiones en la clínica veterinaria “serán cruciales, no solo para prevenir, sino también para recibir asesoramiento sobre su nutrición, futura esterilización, desarrollo o sobre la importancia de factores como el sobrepeso”. EFEverde

Comentarios